martes, 14 de abril de 2009

Interludio justificativo



Para ser honesta me siento terriblemente mal por haber abandonado tanto tiempo mi querido blog, pero lo cierto es que me han superado las tareas profesoriles, y eso que este año tengo menos horas de clases, que si no…


En fin, no es que esquive la responsabilidad, pero debo confesar a modo de justificación que he estado abocada entre otras cosas a seguir difundiendo la fiebre Crepúsculo…


Pues… nuevo año, nuevos alumnos, nuevos lectores. Y esta vez puedo expresar mi completa felicidad pues no sólo varias lectoras han contraído la bella enfermedad (e incluso han seguido multiplicando la pasión por su cuenta, lo que es maravilloso), sino que he contagiado por primera vez a dos chicos… ¡Yo también tengo “chicos Crepúsculo”!


Imaginen mi alegría, pues eso muestra que las novelas que tienen romance no son sólo para mujeres; que hay jóvenes que tienen suficiente apertura mental como para leer cualquier cosa sin prejuicio, y con estos libros realmente es sólo cuestión de empezarlos, pues la intriga terrorífica no es menor, e incluso hay unas escenas más que sangrientas y espeluznantes que son para todo el público aficionado a una buena historia.


1 comentario:

vicente dijo...

lo de los niños con crepusculo es raro hace dos años cuando le pedia a cualquier familiar que me acercase a un centro comercial(ni siquiera los vendian en la mayoria de las tiendas) empezaban a reirse de mi pensando que estaba de broma y en clase tenia que esconder que leia incluso.
dos años despues mi madre se ha leido todos los libros, compañeros de clase me los piden para leerselo estan haciendo incluso turnos(sinceramente creo que deberian de gastarse algo de dinero entre otras cosas porque eclipse lo tengo en ingles y dudo que alguien en mi clase sea capaz de leerselo a parte de mi profesora que se puso como loca al enterarse de que lo tenia en ingles)y hay clases de estudio(mi colegio da tres clases de estudio diarias) en las que nos juntamos unos cuantos y nos ponemos a hablar de los libros.
y pensar que una semana antes de la pelicula mi compañero de mesa se rio de mi al dejarle los libros a un amigo ahora me habla como si me conociese de toda la vida.
es raro lo pronto que pasa el tiempo he de dejarte ya en un mes examenes finales y son importantes para ir a la universidad.
nos leemos

El amor de Bella y Edward...


[Dos y uno]

Dos rojas lenguas de fuego
que a un mismo tronco enlazadas
se aproximan y, al besarse,
forman una sola llama.


Dos notas que del laúd
a un tiempo la mano arranca,
y en el espacio se encuentran
y armoniosas se abrazan.


Dos olas que vienen juntas
a morir sobre una playa
y que al romper se coronan
con un penacho de plata.


Dos jirones de vapor
que del lago se levantan
y, al juntarse allá en el cielo,
forman una nube blanca.


Dos ideas que al par brotan;
dos besos que a un tiempo estallan
, dos ecos que se confunden;
eso son nuestras dos almas.


Rima XXIV, Gustavo Adolfo Bécquer


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